Por si olvido tu voz, abuela.

Siempre me decías que la vida era más sencilla, aunque yo no lo entendiera.
También me decías "mi corazón", "mi currutaca", "Lili linda". Nunca te grabé decírmelo, tal vez porque en esos momentos estaba tan feliz de verte que no se me ocurría sacar mi celular para grabarte.
Pero sí te pude grabar contando historias ante el miedo de cuando te perdiera.
De alguna manera te perdí, pero sé que ganaste mucho en irte. Y te perdí y no te perdí, porque tengo tu voz aquí.

Grabaciones